Primero que nada, yo te recomiendo comenzar por entender que tu proceso de ventas no debe ser tan sólo una copia del que utiliza una empresa que tú consideras similar a la tuya, que consideras como competencia muy cercana o bien un proceso de ventas que te han dicho que garantiza resultados fenomenales.
Ten siempre en cuenta que la situación de cada empresa en cuanto a disponibilidad de tiempo, herramientas, dinero y personas es única, por lo que tu proceso debe ajustarse a las necesidades y capacidades de tu realidad particular.
Partiendo de este punto, centra entonces tu atención en entender cómo estás vendiendo tus productos y servicios hoy en día, y compara todas las actividades que tú o tu equipo ponen en marcha, con aquellas recomendadas dentro de un proceso de ventas estándar.
- ¿Estás abarcando todas las áreas recomendadas o, por el contrario, estás llevando a cabo un proceso que podríamos definir como “aleatorio”: según te funcione o no, vas viendo?
- ¿Estás poniendo el foco de tus acciones para conseguir más clientes en la presentación de tus productos y servicios, sin prestarle la debida atención al conocimiento de las necesidades específicas de tu cliente potencial?
- ¿Qué tanto tiempo estás dedicando a la resolución de objeciones? ¿O estás centrándote en defender la propuesta económica que has preparado para tu cliente potencial, en lugar de tratar de identificar oportunidades para personalizarla aún más la solución que ofreces?
- ¿Cuántos intentos de acercamiento tienes que hacer hasta lograr una reunión, presencial o virtual, con la persona responsable de tomar decisiones?
- ¿Cuál, o cuáles, de todas las acciones que estás poniendo en marcha, tú observas que te están dando los mejores resultados? ¿Cuáles no?
El objetivo es que puedas crear un proceso estructurado y organizado, que por encima de todo, te funcione, que sea flexible y del cual puedas esperar resultados específicos y consistentes en el tiempo. Ponle atención a todos los detalles que puedas. Mientras más detallista seas en tu análisis, mejores serán los resultados de tus acciones.
Tu Proceso de Ventas debe ajustarse a la realidad específica de tu negocio o proyecto emprendedor y aprovechar al máximo todos los recursos disponibles de tiempo, dinero, personas y herramientas.
¿Has preparado un argumentario de ventas? ¿Has definido con las características que definen a tu cliente ideal, ese cliente con el que quieres hacer negocios?
Cada empresa, cada negocio, tiene una realidad particular. Su proceso de ventas debe ajustarse a dicha realidad específica y ser flexible, medible además de repetible.
A partir de aquí se trata de implementar una secuencia de:
- Poner en marcha tu proceso de ventas.
- Establecer los parámetros que te permitirán medir los resultados que obtienes.
- Analizar a intervalos regulares lo que te está funcionando y lo que no.
- Optimizar y potenciar lo que funciona, y corregir, reemplazar o desechar lo que no.
- Implementar acciones nuevas según lo consideres necesario.
Si te detienes un momento a analizarlo todo, es una dinámica muy interesante. En ningún momento debes bajar la guardia y pensar que como ya el proceso de ventas está creado, no hay más nada que hacer sino sentarse a esperar los resultados.
¡Todo lo contrario! Un proceso que no se ejecute de forma adecuada, jamás arrojará los resultados para los cuales fue diseñado.
Toda empresa, por pequeña que sea, es un organismo vivo, cambiante. Y mientras más competitivos sean los mercados, más tendrás que acostumbrarte a vivir en un escenario extraordinariamente dinámico.
Por eso, mi invitación es a que te sientes a pensar por un momento cómo estás vendiendo tus productos y servicios a día de hoy:
¿Estás siguiendo un proceso definido? ¿O simplemente vas al ritmo que te marca el día a día?
A partir de acá, siéntate a crear una estructura base a partir de la cual puedas personalizar tu propio proceso y, a través del ciclo de ejecución – medición – revisión – optimización y corrección, ve modificándolo hasta que te permita obtener resultados positivos de forma consistente.
Si necesitas ayuda durante el camino, puedes contar con mis servicios para ponerlo todo en marcha.